NoSQL

Las bases de datos NoSQL pueden manejar grandes volúmenes de datos no estructurados o semi-estructurados gracias a su diseño flexible y escalable. Al no estar limitadas por esquemas fijos, como en las bases de datos relacionales, pueden almacenar y procesar una gran variedad de formatos de datos, como documentos JSON, XML, imágenes, y contenido de redes sociales. Esta flexibilidad permite agregar nuevos tipos de datos sin necesidad de modificar la estructura existente de la base de datos.

Además, las bases de datos NoSQL están diseñadas para escalar horizontalmente, distribuyendo los datos a través de múltiples servidores o nodos. Esto significa que cuando el volumen de datos crece, se pueden añadir más servidores a la infraestructura para mantener el rendimiento y la capacidad de respuesta. La capacidad de particionar y replicar datos en un clúster de máquinas facilita el manejo de cargas de trabajo grandes y distribuidas, proporcionando tanto la escalabilidad como la disponibilidad necesarias para aplicaciones que procesan cantidades masivas de datos.